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¿Qué son?

Los procesos de desarrollo son individuales y diferenciales en cada persona. El desarrollo cognitivo de esta forma es también diferencial. Una de las posibilidades de manifestación diferencial es la de aquellas personas que tienen una o varias capacidades con valores superiores al resto de la población.

La concepción de la inteligencia ha cambiado a lo largo de los años. Según modelos tradicionales como el de inteligencia unitaria de Spearman con su famoso factor G, la manifestación de la inteligencia era global y venía dada por mediciones que se establecían atendiendo al cociente intelectual (CI). De esta forma la deficienciación o la superdotación venían dados por medidas inferiores a 70 o superiores a 130 respectivamente. A partir de los modelos multifactoriales de Thurstone y propuestas posteriores, se propone que existen diferentes manifestaciones de la inteligencia. A partir de aquí surgen propuestas como la teoría de las inteligencias múltiples de Gardner. Hoy en día, se habla, por lo tanto, más allá de la concepción clásica de superdotación en torno a un cociente intelectual superior a 130, de altas capacidades (AACC). Este concepto aúna la idea de superdotación como una capacidad por encima del percentil 70 en todos los ámbitos cognitivos y los talentos simples o complejos que implicaría una manifestación superior a 90 en uno o varios ámbitos respectivamente.

Además, se hace necesario atender a la conceptualización de Renzully, según la cual la alta capacidad implica más allá del funcionamiento cognitivo de alto nivel, unos niveles elevados de creatividad y de implicación con la tarea a la realizar.

Por otro lado, es preciso tener en cuenta que la inteligencia como aspecto del desarrollo, es variable a lo largo del desarrollo y puede tener diferentes manifestaciones. Por ello, el diagnóstico de altas capacidades no debería ser algo estático, algo que se “tiene” en un momento dado y se queda ahí para toda la vida. Un niño puede tener en un momento determinado una capacidad cognitiva o capacidad superior durante la infancia y ubicarse en la media en años posteriores. Más aún, existen procesos de desarrollo precoz, en los cuales un niño madura ciertas funciones antes que el resto, estancándose posteriormente y ubicándose en la tipicidad. Por ello, el diagnóstico de alta capacidad no debería de realizarse de manera muy temprana, si bien es necesario estar a los procesos de desarrollo diferenciales y atender a los mismos de manera precisa.

¿Cuáles son las principales señales de la alta capacidad?

Existen muchos mitos sobre las AACC que conviene desterrar. Los niños con AACC son primero y ante todo niños. La etiqueta en este caso de altas capacidades no puede ni debe designar ni clasificar a la persona. Conviene mencionar que los niños con altas capacidades tienen en su mayoría un buen ajuste socioemocional, más allá de lo que se pudiera pensar. Sí es cierto, que existen ciertas manifestaciones comportamentales, emocionales y sociales fruto de sus características cognitivas. A continuación se mencionan algunas de las posibles manifestaciones que se pueden observar:

  • Sobreexcitación
  • Baja autoestima
  • Perfeccionismo insano
  • Poca flexibilidad
  • Disincronía en el desarrollo
  • Bajas habilidades sociales o al menos no al mismo nivel que su capacidad cognitiva
  • Problemas de aprendizaje
  • Introspección que puede dar lugar a problemas de aislamiento
  • Pensamiento profundo que se relaciona con la introspección pero que les puede aislar de los compañeros
  • La baja autoestima y autoeficacia puede derivar en problemas sociales y emocionales
  • La alta capacidad intelectual puede coexistir con un funcionamiento medio o incluso por debajo de la media en otras áreas del desarrollo como la social
  • Puede haber estrés emocional asociado y dificultades de ajuste
  • Los niños con AACC pueden ser impacientes con los demás en clase y con las actividades.
  • Pueden realizar muchas preguntas y en ocasiones preguntas no habituales
  • Pueden ser difíciles de persuadir
  • Se les puede llegar a ver como disruptivos y poco flexibles.
  • Dado que pueden tener un vocabulario de más nivel pueden no adaptarse con los iguales en edad
  • La inactividad les puede generar frustración, pueden ser vistos como hiperactivos
  • Suelen tener intereses múltiples en diferentes actividades lo cual les puede llevar a frustración ante la falta de tiempo para hacer cosas
  • Pueden tener un mayor desarrollo del sentido del humor lo cual les puede convertir en el centro de atención de la clase y a falta de entendimiento de los iguales
  • Suelen tener una gran preocupación por temas humanitarios, la igualdad o la justicia.
  • Suelen ser independientes y prefieren el trabajo independiente.

Más allá de estas posibles manifestaciones, conviene recordar lo dicho. Los niños con AACC son ante todo personas. En la mayoría de los casos no tiene porque existir un desajuste ni dificultades emocionales o compartamentales. Además, cada caso requerirá de una evaluación precisa y por lo tanto de una intervención adaptada e individualizada.

La inteligencia como aspecto del desarrollo, es variable y puede tener diferentes manifestaciones

¿Que hacer?

Las posibles actuaciones en el trabajo con niños con AACC vendrán determinadas por el diagnóstico individual de cada caso. DE manera genérica y sin que esto pueda servir como guía universal, existen algunas generalidades que se ha comprobado que pueden ayudar para fomentar el aprendizaje e interés de niños con AACC:

  • Promover el aprendizaje activo mediante discusiones, Resolución problemas grupal, Simulaciones, Debates o Proyectos investigación
  • Establecer rutinas
  • Plantear actividades que supongan retos y trabajen la zona de desarrollo próximo planteada por Vigotski
  • Partir de actividades que les interesen y les motiven
  • A nivel de padres sería adecuado prestar atención a las necesidades y demandas de los niños
  • Tratar de promover que participen en actividades sociales y de relación con los iguales
  • Fomentar una práctica deportiva saludable, así como hábitos de descanso y de alimentación adecuados.
  • Limitar la sobreexposición a las nuevas tecnologías que pueden derivar en una mayor sobre estimulación.
  • Limitar las comparaciones con otros niños sin AACC o entre niños con AACC, que pueden fomentar la competición insana.
  • Ser flexible a sus necesidades y no limitar sus preguntas e inquietudes

Y como en otro casos, conviene:

  • Solicita ayuda. Solicita ayuda a otros profesores, psicólogos/orientador, padres, profesionales que puedan aconsejarte.
  • Busca información. Es muy importante que busques información seria y rigurosa en internet. La lectura de documentos de ayuda es una forma clara de ayudarte a ti mismo. Puedes buscar más ayuda en los apartados de debajo donde ampliar información.